Ventajas

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Ahorro de (costes de) energía

Los zócalos radiantes no utilizan fuentes de energía fósiles ni materias primas no renovables, sino que funcionan con corriente o con agua, por lo que resultan más económicos, y funcionan según el principio del calor radiante. Una distribución del calor uniforme y la rápida regulación o control de la temperatura por medio de termostatos contribuyen a un funcionamiento energéticamente eficiente, económico y sostenible, con un óptimo aprovechamiento del calor. Posibilidad de disfrutar de un ahorro de energía de hasta el 28 %, incluso sin aislamiento térmico adicional, en comparación con los sistemas convencionales. ¡Así se protege el medio ambiente y el bolsillo!

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Distribución del calor uniforme

Los zócalos radiantes emiten su calor radiante a la estancia y las paredes de manera uniforme, facilitando así un calentamiento más rápido. Al mismo tiempo dificultan el enfriamiento, ya que no generan zonas frías, como sucede con las calefacciones por convección, y por lo tanto nada altera la uniformidad de la temperatura. El calor se aprecia en toda la estancia, ya que la colocación de los zócalos radiantes es continua. De este modo, la temperatura ajustada en el circuito de alimentación puede ser tranquilamente 3 °C inferior a la habitual para los radiadores. Gracias a la óptima distribución del calor, el ambiente sigue resultando agradable y acogedor.

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Sin moho

Los zócalos radiantes previenen la humedad en las paredes y, por lo tanto, evitan la formación de moho. El calentamiento uniforme de la estancia, lo que se debe al calor radiante, permite que las paredes no solo reflejen el calor, sino también que lo absorban en parte. De este modo no se enfrían y se previene la condensación de agua en los cristales de las ventanas. Se trata de una opción eficaz para prevenir la formación de moho y conservar la estructura, en particular de edificios antiguos, iglesias y edificios históricos. ¿Paredes húmedas y moho? ¡No con los zócalos radiantes!

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Un ambiente saludable

Los zócalos radiantes contribuyen en gran medida a disfrutar de un ambiente sano y agradable. Gracias al calor radiante, el aire de la estancia apenas se desplaza, por lo que casi no se levanta polvo ni otras partículas. La menor contaminación ambiental en espacios interiores resulta especialmente favorable para aquellas personas con alergia o asma, por lo que cambiar a una calefacción por zócalo radiante suele resultar recomendable por motivos de salud. El aire no está demasiado seco ni demasiado húmedo, y genera un ambiente agradable que contribuye al bienestar y la salud.

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Carácter estético

El diseño compacto de los zócalos radiantes realza visualmente la estancia, mientras que su aspecto de rodapié les permite pasar prácticamente desapercibidos.
La variante estándar cuenta con paneles en blanco (RAL 9016), si bien le ofrecemos toda la gama de colores RAL a petición, para que pueda incorporar los zócalos radiantes al diseño y el ambiente de cualquier estancia, atendiendo a sus gustos personales. ¡Con ellos podrá reemplazar maravillosamente los antiestéticos radiadores!

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Instalación en poco espacio

Los zócalos radiantes, que unen paredes y suelos igual que un rodapié, pueden integrarse en la estancia en muy poco espacio. Mientras que las paredes radiantes convencionales, los voluminosos radiadores o las impresionantes chimeneas requieren un gran espacio, que podría aprovecharse para muebles, complementos o decoración, los zócalos murales le dejan libres las paredes. La imagen de conjunto no se altera y, gracias a su construcción compacta, usted sigue disponiendo de mucho espacio libre para armarios, estanterías, sillones, etc.

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Flexibilidad de uso

Los zócalos radiantes entran en consideración tanto para la planificación de obras nuevas como para la rehabilitación energética de edificios. Viviendas particulares, inmuebles de uso comercial, gimnasios, guarderías y numerosos edificios públicos se plantean la incorporación de zócalos radiantes, ya que este sistema de calefacción innovador puede adaptarse a las diversas características constructivas gracias a sus numerosos componentes y prácticos accesorios. ¡Las escaleras o las ventanas hasta el suelo tampoco suponen ningún problema para nuestros zócalos radiantes!

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Montaje rápido y sencillo

Los zócalos radiantes no requieren modificaciones constructivas. No es necesario abrir paredes ni modificar la planta. Gracias a sus numerosas posibilidades de montaje, pueden instalarse prácticamente en cualquier estancia y, a petición, pueden suministrarse también longitudes personalizadas. La estructura se monta íntegramente en la pared utilizando un riel base y se cubre luego con paneles. Aquí tiene una guía de montaje clara y comprensible. La conexión se establece al circuito de agua o a la red eléctrica.